lunes, 14 de marzo de 2016

Letras Violeta Elecciones 2016 ¿Y las mujeres qué?



Soledad Jarquín Edgar
Sin duda las elecciones de este próximo 5 de junio representarán el paso más importante en la elaborada democracia mexicana y Oaxaca no es la excepción. La historia de la participación de las mujeres ha estado plagada de un largo proceso en el que participaron mujeres heroicas, sin duda, a quienes la historia no ha reconocido del todo.
Dos ejemplos concretos de esa falta de reconocimiento son Hermila Galindo Acosta y Elvia Carrillo Puerto, a quienes se les debe su lugar en la historia. Toca ahora reivindicar la vida y obra de estas mujeres, sostuvieron en entrevista por separado las historiadoras Rosa María Valles Ruiz, Dulce María Sauri Riancho y Elva Rivera Gómez, quienes coincidieron en que a las mujeres en general se les ha invisibilizado. Trabajo periodístico que puede usted leer en http://goo.gl/R8xt0V
Hermila Galindo Acosta fue una sufragista constitucionalista y Elvia Carrillo Puerto una de las tres primeras diputadas locales en Yucatán electas en 1923. Pero la historia mexicana registra hechos de mujeres demandando el voto a lo largo y ancho del país desde hace ya casi 200 años, de manera inmediata a la conclusión de la Guerra de Independencia. ¿Acaso no habían dado también la vida y su patrimonio durante las refriegas? El hecho concreto y documentado son las mujeres de Zacatecas en 1924.
Así que Hermila Galindo y Elvia Carrillo Puerto son dos de las muchas mujeres que dejaron su pensamiento, su tiempo, su vida personal para luchar en el siglo XX y lograr que en 1953 se reconociera el voto universal de las mujeres.
Hermila Galindo, a pesar de su incansable lucha, no tuvo el privilegio de votar en las elecciones 1955, las primeras en las que las mujeres participaron. Ella murió tranquila en su casa el 19 de agosto de 1954.
Hoy, 61 años después de aquellas primeras elecciones y a 62 de la muerte de Hermila Galindo, las oaxaqueñas acudiremos por primera vez a unas elecciones paritarias, es decir, habrá un 50 por ciento de mujeres y otro 50 por ciento de hombres en las boletas electorales del 5 de junio. 
Bueno, hay que aclarar, casi todas las oaxaqueñas considerando que 417 municipios no fueron incluidos por la LXII Legislatura para contemplar la paridad, ahí seguirá prevaleciendo la palabra de la asamblea comunitaria, integrada mayoritariamente por hombres. Ahí opinaron algunas legisladoras las cosas deben ir más despacio. Es decir, que tanto es tantito, si ya esperamos casi 200 años para esta igualdad en las elecciones que no puedan esperar otros 200 o tal vez 300 años.
Los datos son los siguiente, estos pueden aún cambiar, todo lo cual dependen de si serán o no aceptadas las candidaturas independientes, e incluso de un candidato por partidos políticos.
Lo cierto es que a aunque se auguraba la posibilidad de una candidatura independiente por parte de la panista Eufrosina Cruz Mendoza, porque así lo había anunciado, al final tres varones presentaron su intención ante el órgano electoral local y la definición está en veremos. Dos coaliciones han definido a sus candidatos, lo mismo que cuatro partidos políticos y pendientes aún dos partidos políticos más.
El dato importante aquí es que todavía pesa el patriarcado. No existe ninguna posibilidad de que una mujer gobierne en Oaxaca en los próximo seis años.
En la elección 2016 también se renovará a las y los integrantes de la Legislatura local. 25 curules de mayoría relativa y 17 más por la acción afirmativa de la representación proporcional o plurinominal.
Todo iba viento en popa hasta que el pasado 10 de marzo, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con el voto en contra de la Magistrada María del Carmen Alanís Figueroa, echaron para atrás los Lineamientos para la Paridad de Género, es decir ahora no serán la mayorías de los espacios en disputa para las mujeres ni en las curules ni en las planillas municipales. Como así lo proveían esos lineamientos, tampoco irán encabezando las fórmulas plurinominales.
No, esos eran demasiados privilegios para las mujeres, así que seguramente como
afirman analistas y feministas, esas listas estarán encabezadas por hombres. Al final esto impactará en la cantidad de mujeres y de hombres que tengan una curul. Si realmente se quisiera una representación paritaria en el Congreso se tendría que obligar a los partidos y coaliciones a que las listas sean encabezadas por mujeres. Pero eso de acuerdo con las mismas expertas parece mucho pedir.
De igual forma se renovará a las autoridades de 153 ayuntamientos, los otros 417 seguirán de la mano del patriarcado y de los partidos políticos que subrepticiamente dirigen ya los procesos normativos internos en un gran porcentaje de esos municipios, un tema que resulta difícil de reconocer por parte delas autoridades y de muchos académicos. En fin, una manifestación del romanticismo político.
Por otro lado, también por definir el futuro de 46 planillas independientes, 41 de ellas encabezadas por hombres y cinco, solo cinco, por mujeres, para cuatro municipios.
Huajuapan de León, propietaria Nancy Ramírez Sandoval; suplente Leidy Elizabeth Ríos Díaz.
Reforma de Pineda, propietaria Rosa María Aguilar Antonio; suplente Rubí del Carmen Cabrera Gómez.
Juchitán de Zaragoza: propietaria María Elena Caballero Pineda; suplente Lucía Santiago Regalado.
Juchitán de Zaragoza: propietaria  Pamela Itzamaray Terán Pineda; suplente Rosario de Fátima de la Cruz Santiago.
Santiago Pinotepa Nacional: propietaria Carmen Edith Rodríguez Baños; suplente María de la Luz González Meza.
Lo que no deben perder de vista es que "la paridad llegó para quedarse, se revocó la forma, no el fondo, la paridad es un mandato constitucional, el cumplimiento no es opcional, es obligatorio. Las mujeres seguiremos tutelando la paridad, es un derecho. Ni un paso atrás", como atinadamente afirmó Elva Narcia Cancino, integrante de la Red Chiapas por la Paridad Efectiva.
Es decir, debe haber 50 por ciento de mujeres en todas sus propuestas. Lo quieran, lo entiendan o no. Así de simple y de sencillo.