domingo, 18 de mayo de 2014

Mujeres y Política Santa Lucía…doble fondo

¡Ah, qué tiempos aquellos!





Mujeres y Política
Santa Lucía…doble fondo





Soledad Jarquín Edgar
Santa Lucía del Camino municipio conurbado a la capital oaxaqueña, es decir aquí a la vuelta, es hoy un foco de atención y tensión política consecuencia de la desmedida ambición del actual presidente municipal Galdino Huerta Escudero, quien de acuerdo con acusaciones vertidas en los últimos días, en sólo cinco meses ha mostrado “el cobre”, pretendiendo hacer que los usuarios de servicios paguen costos excesivos e, incluso, extorsionando a propietarios de  bares y restaurantes. El caso ya fue denunciado desde esta perspectiva.
Pero esa no es la única mala nota del munícipe de extracción priista, no. Este munícipe que es capaz de armar un fiestón a través del DIF Municipal para rendir “homenaje” a las madres, como sucedió el pasado 11 de mayo, con tremenda pachanga que consistió, según la invitación publicada en su Facebook, en “un show cómico musical, mariachi, rifa de regalos y para bailar hasta la madrugada Los Sobrevientes”,  tiene rasgos de intolerancia y misoginia, como parte de la doble moral que practican muchos políticos.
Huerta Escudero muy pronto entendió que el municipio que gobierna es un gran filón de oro, uno tan grande que ha permanecido durante años reportando grandes ganancias a “empresarios” y gobernantes, la cara no oculta de un problema social que aterra: la trata de personas, en este caso de mujeres.
De un solo golpe y a través de la Secretaría Municipal, el presidente municipal ordenó dirigir un oficio a las regidoras Paulina Flores Hernández y Maribel Catalina Díaz Olmedo para que se les informara que fueron suspendidas “provisionalmente” y separadas del cargo.
Paulina Flores, regidora de Salud y Asistencia Social, y Maribel Catalina Díaz Olmedo, concejala de Espectáculos, Vinos y Licores. Sin duda dos cargos “estratégicos” considerando el elevadísimo número de antros, bares, cantinas, tables dances, clubes nocturnos y demás que operan en la demarcación -380 con licencia para operar y una cantidad semejante que operan en la clandestinidad-.
¿Cuál es el argumento para separar provisionalmente a estas dos regidoras de su cargo y al mismo tiempo tomar la protesta a sus suplentes?
De acuerdo al oficio sin número emitido el 1 de abril pasado, ambas habrían sido destituidas con base en el Artículo 45 de la Ley Orgánica Municipal del Estado de Oaxaca, en relación a los artículos 84 y 85 de la misma reglamentación. Es decir, ambas fueron destituidas porque “de forma injustificada faltaron a las sesiones de Cabildo”, de ahí que el siguiente paso sería solicitar al Congreso del estado la revocación de mandato.
Todo saldría a pedir de boca considerando que esta no sería la primera vez que el Congreso local actuaría en contra de una autoridad electa mediante el voto ciudadano y en específico si se trata de una mujer, como sucedió con la presidenta municipal de Cosolapa, Carmina Álvarez, por fortuna la Suprema Corte de Justicia de la Nación les enderezó la plana a los legisladores, quienes salvo contadas excepciones, se excedieron a todas luces.
Galdino Huerta Escudero ha hecho caso omiso a las solicitudes que el Tribunal Estatal Electoral le ha hecho en dos ocasiones para que explique su proceder. De acuerdo con Paulina Flores García, en su caso generó molestia cuando por oficio el 18 de marzo protestó ante la probable comisión de actos de extorsión, expidiendo libretos a trabajadoras sexuales.
La regidora “suspendida provisionalmente” le explica a detalle el motivo del retraso en la entrega de los libretos, los cuales se harían conforme establece el reglamento, pero sobre todo luego de que comprueben su buen estado de salud mediante una serie de pruebas de laboratorio para evitar infecciones de transmisión sexual, incluyendo el VIH-Sida.
Galdino Huerta no sólo entregó con retraso los libretos a la regiduría de Salud sino que realizó un operativo para sancionar a quienes no tenían libreto en nueve bares o centros nocturnos, donde previo cobro les ordenó que se presentaran al día siguiente a la clínica municipal de salud para recoger su libreto, sin necesidad de realizar exámenes médicos. Operativo al que, por cierto, no fue convocada la regidora Flores Hernández.
El reclamo de la concejala, reitero por escrito, fue suficiente para llevar a cabo la “sustitución provisional” y nombrar a su suplente, no sin antes recordarle, también mediante oficio, cuáles eran sus “facultades” como presidente municipal, de las cuales carece la regidora de Salud para realizar el control sanitario.
En el caso de la regidora de Vinos y Licores, Maribel Catalina Díaz Olmedo, quien esta semana se encadenó a las puertas del Palacio de Gobierno,  afirmó que su destitución provisional es resultado de su negativa a ceder al acoso y hostigamiento sexual del munícipe. Buen decía mi abuela: Lo más feo es lo que más guerra da. El argumento del munícipe ante la prensa, donde se ventila el caso a diestra y sienestra, es que la joven regidora habría extorsionado a comerciantes.
Sin embargo, esta misma semana Galdino Huerta Escudero fue denunciado penalmente ante las autoridades por el delito de extorsión y abuso de autoridad, denunció la Alianza de Comerciantes y Prestadores de Servicios de Santa Lucía del Camino. Los 17 empresarios sostienen el presidente municipal pretendía realizar cobros de entre 130 mil 200 mil pesos por la renovación de licencia de continuidad para el presente año, para lo cual enviaba a Oscar Segura Fuentes, quien se ostenta como Coordinador de Administración, Fiscalización y Obligaciones Municipales, cargo que no existe.
Así, en medio de una guerra de dimes y diretes, el munícipe no está dispuesto a tolerar a las mujeres de su cabildo, menos aún si le pudieran representar algún problema para lograr sus objetivos de refinanciamiento personal, las acusa de cometer actos que no les corresponde, las difama señalando que son ellas las que hacen cobros no permitidos y, sin embargo, es él quien finalmente es denunciado ante las autoridades judiciales. Aquí se podría aplicar el dicho que señala que las cosas caen por su propio peso, esta vez el peso de la corrupción que genera tensión en el muy abandonado municipio conurbado de Santa Lucía del Camino.
Pero yo planteaba, al principio y lo dejé al final para explicar algunas cosas raras…el asunto de trata de personas con fines de explotación sexual. Es muy notorio y de conocimiento general sobre los antros o giros negros de mala muerte que operan en los municipios conurbados a la capital oaxaqueña, como es el caso de Santa Lucía del Camino, donde el número es increíble: unos 380 con licencia y una cifra similar sin licencia.
En muchos de estos sitios hay tables dance, cantinas y restaurantes disfrazados donde mujeres son ofrecidas como mercancía a las hordas, seguramente bajo la supervisión de sus proxenetas, porque basta con un “libreto” sanitario, nadie investiga quiénes son esas mujeres, de dónde vienen, quién está detrás de estas jóvenes y a veces adolescentes mujeres. Resulta “extraño” porque una podría pensar que las autoridades hacen su trabajo, que algo hacen para responder a las demandas de las familias de las mujeres desaparecidas frente al grave problema de trata de personas con fines de explotación sexual y que al menos garanticen que las mujeres que “trabajan” (bajo amenazas) en esos sitios indescriptibles y carentes de condición humana no son las miles de desaparecidas que hoy se buscan en México y en Centroamérica y de otras naciones del mundo.
Ha sido el presunto caso de corrupción y abuso de autoridad de Galdino Huerta quien nos pone sobre la mesa el tema del que lamentablemente ni las autoridades estatales ni federales se han molestado en observar con detenimiento en esos sitios donde basta pagar “cuotas” para operar y por si no lo saben en caso de que los vecinos se inconformen hasta son secuestrados por supuestos agentes federales, otros son asaltados y golpeados, una era de terror la que se vive en Santa Lucía, pero en Oaxaca no pasa nada, nadie se entera, dicen las autoridades.
No se entera de nada la burocracia judicial inventada en los últimos sexenios para atender a víctimas de violencia sexual y trata de personas, organismos púbicos que se inventan para obtener recursos nacionales e internacionales, aunque no den resultados.
Todo esto hace cómplices a los tres niveles de gobierno y a quienes los encabezan en lo Ejecutivo, Judicial y Legislativo. A estas alturas, en serio, nada les despierta curiosidad, ni los rumores que son muy fuertes ni la presencia de jóvenes en esos centros de mala muerte que operan en los municipios conurbados, donde los munícipes y lo que venga después de ellos pueden hacer y deshacer. Para muchos servidores públicos, principalmente hombres, la prostitución es un mal necesario,  y como tal no lo ven mal ni se preocupan. Cuestionan la vida de las niñas y mujeres desaparecidas y claro satanizan a sus familias para justificar sus omisiones, y complicidades. Otros la justifican como resultado del circulo de la pobreza pero tampoco ven mal que haya gente pobre.
Sin duda, en Santa Lucía del Camino hay tanto omisiones como complicidades. Las ha habido siempre y Galdino Huerta no piensa perder su mina de oro. Es de esos municipios con permiso para la prostitución, la trata y el comercio sexual de mujeres y hombres de todas las edades. Así que Galdino Huerta tiene mucho de fondo en sus acciones misóginas, ni duda cabe. El caso de Galdino como el de Cuauhtémoc Gutiérrez y otros que suceden cotidianamente deben poner a pensar que algo se pudre en el PRI y que la comercialización de candidaturas lleva irremediablemente a toda clase de filtraciones de sujetos de escasa o nula calidad humana para ser dignos gobernantes.
Hoy existe una protesta de comerciantes que piden a Gabino Cué, el gobernador de la República Independiente de Oaxaca, que no eche en saco roto sus denuncias e incluso, advierten, que tienen pruebas suficientes para mostrar la mala conducta de Galdino Huerta y de su testaferros Oscar Segura, videograbaciones y fotografías. Veremos qué sucede, veremos hasta dónde Huerta puede seguir repartiendo dinero para que muchos medios se callen.
@jarquinedgar


Palabra de Antígona No a la violencia contra las mujeres





Palabra de Antígona
No a la violencia contra las mujeres







Por Sara Lovera
Todas las mañanas me levanto deseando no encontrar una tragedia en la puerta. Deseando no leer una noticia desastrosa, ni encontrarme con una estadística que me quite la alegría y la felicidad. Me miro al espejo y deseo que el tiempo venga como una borrasca y me lleve colgada de un planeta que me haga no mirar la tierra.

Nada es tan terrible como los datos y las descripciones de la violencia contra las mujeres. En menos de una semana, durante el mes de mayo, donde una   debiera solo tener flores, Sandra Luz Hernández fue asesinada en Sinaloa por  buscar a su hijo y convertirse en activista; en Tabasco una niña de 12 años se declaró grave después de ser violada, golpeada  y abandonada; en la ciudad de México apareció una campaña oficial para promover la lactancia materna con imágenes estereotipadas de las mujeres.

En esos mismos días las mujeres y los hombres  se horrorizaron mundialmente por el secuestro de las niñas de Nigeria, que ahora aparecen en la televisión ya rezando o leyendo el Corán, ataviadas de velos negros.

Y también he conocido, escrito  y leído lo que sucede en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), donde la ilusión me hizo confiar en un defensor de derechos humanos, Enrique González Ruiz, cuyo caso me apena tanto como a muchas, porque es presa de su condición masculina, atávica y abusiva sin consciencia, que se ha atrevido, con tal de defenderse, a poner en riesgo la vida de Clemencia Correa, al acusarla de ser agente policiaca de Colombia, mujer de la que abusó y hostigó  este  hombre. Y horroriza que  en la UACM y entre gente muy decente, se haya levantado una campaña de linchamiento contra  las denunciantes.

Los hombres y su cultura, los gobernantes y los líderes, todos y algunas mujeres, no quieren, como yo misma no quiero, hacerse cargo de lo que significa la violencia contra las mujeres y cuán poco hemos avanzado, qué esfuerzo enfrentarla y que coraje hacerlo y bien.

El día 14 me quise figurar que no escucharía nada más sobre los terribles acontecimientos. Quería escuchar adelantos, como se anunció el 20 aniversario de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, conocida como Belém do Pará.

Y nada, ahí tuvo que ratificarse, por parte de los gobiernos, que ahora sí van a cumplir con la Convención, mientras las cifras de asesinadas, violadas, hostigadas sexualmente, traficadas con fines de explotación sexual son el pan cotidiano. Como si nada se hubiera hecho, como si nada se hubiera dicho, como si nada se hubiera estudiado.

Hubo momentos, en un enorme espacio que preparó el gobierno de Hidalgo, haciendo notar que ahora si en México hay en los altos niveles decisión de entrarle al problema. Decía hubo momentos tremendos, como cuando mirando un video se le corrieron las lágrimas a una alta funcionaria pública; o cuando se escuchó tronar un discurso de una congresista mexicana que sin verse a sí misma, era tan violenta, cómo llamaba a reivindicar a las guerreras que construyeron la Belén do Pará.

Momentos de enojo y reflexión. Y todo este escenario, el del aniversario de la Belém do Pará, lo de las niñas de Nigeria, la convicción de que apenas bordeamos el principio, ha generado varias cosas que hay que anotar para ponerlas en el espejo en la mañana, para no olvidarlas, para llevarlas en la bolsa y en la boca, para que se metan en el cuerpo y no dejen salir a los demonios.

Una movilización global para conseguir una Ley Mundial que impida la violencia contra las mujeres. Se lo piden al presidente de los Estados Unidos, no sé por qué, pero suena bien. Ya la discuten los senadores esta iniciativa de más de cien organizaciones civiles.

Que en agosto habrá sido firmada la hermana gemela de Belém do Pará, para Europa, conocida como Convenio de Estambul, sobre la violencia familiar y sexual.

Que el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, presionado por la protesta, retiró la campaña estereotipada donde Maribel Guardia decía: no le des la espalda, dale pecho, ella toda contorneada y bella, semidesnuda.

Y finalmente, nada más faltaba, la palabra empeñada del gobernador de Hidalgo, Francisco Olvera Ruiz, quien dijo que dará  atención integral a la violencia contra las mujeres y trabajará por su igualdad sustantiva. Se dirá que es bien fácil prometer, lo sorprendente es que el político hidalguense que tiene que lidiar con una de las entidades más pobres del país, dijo: que me exijan cuentas. Perfecto, ya se sabe, ahora a darle seguimiento.