Mujeres y Política
PRD, sin vergüenza
Soledad JARQUÍN
EDGAR
Resulta por demás increíble lo que sucede en México. Desde su fundación el
Partido de la Revolución Democrática (PRD) fue para muchas mujeres un espacio
que habría de garantizar los derechos políticos de las mujeres.
Hoy el PRD está en la mira de las mexicanas. Ha sido una lucha tenaz la que
emprendió Beatriz Cosío para que al interior de ese partido se cumpliera con la
paridad de los órganos de dirección. Una y otra vez, sin rendirse, no sólo
cuestionó esa falta de paridad sino que además utilizó los medios legales para
hacer que se corrijan los “errores” cometidos hasta ahora.
Una vergüenza para las perredistas lo que sucede. Inexplicable a todas
luces en el partido que se define desde el nombre como democrático. Así que
ante la negativa de la dirigencia nacional, que encabeza Jesús Zambrano
Grijalva, muchas perredistas concluyen que la inequidad de género y en
consecuencia la discriminación hacia las militantes se reflejó en los
resultados de las elecciones del 7 de julio que se efectuaron en 15 entidades
del país.
Tienen razón, no hay explicación, porque después de meses de insistir, el
Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación emitió una resolución en
contra del PRD por lo que ya hemos dicho: la falta de cumplimiento de la
paridad en sus órganos de dirección, en los que hasta ahora y a pesar de esa
resolución reflejan una ausencia real de las mujeres y que llevó este 21 de
julio a iniciar una campaña nacional e internacional para que se cumpla con la
sentencia.
Es una necedad hacer como si nada pasara. Ignorar lo que indica la
sentencia y con ello ignorar a las militantes del PRD. Pareciera, hasta ahora
como si no hubiera poder humano que garantice la representación equilibrada de
hombres y mujeres en la dirección perredista. Y si eso sucede a ese nivel, que
es visible, una se explica lo que pasa al interior de los estados, un caso
concreto es Oaxaca.
En ese sentido, Beatriz Cosío Nava explicó en días pasados, que tuvieron
que presentar ante el Tribunal un incidente de inejecución, ya que el pasado 18
de julio terminó el plazo para que la dirigencia nacional perredista cumpliera
la sentencia de que a más tardar el 18 de julio se realizara el Consejo
Nacional y realizar los cambios para garantizar la presencia de las mujeres,
tanto en el secretariado nacional como en la comisión política.
Mi abuela Lucha diría que Jesús Zambrano tiene la tez muy azul y no
precisamente amarilla como le corresponde al partido del Sol Azteca, porque a
pesar de la resolución no se mueve ni un dedo para que al menos cuatro
perredistas mujeres sean incluidas en la comisión política y seis en el
secretariado nacional.
No es otra cosa que reconocer los derechos políticos de las ciudadanas
mexicanas. Sólo eso. El mismo tema que de una u otra manera se ha planteado en
este país hace casi dos siglos, derechos inscritos en nuestra constitución
desde 1953 y determinados expresamente en la legislación electoral en 1993.
Estamos pues en la antesala de los grandes “festejos”, que ya se ha dicho,
se preparan en diversos ámbitos institucionales, pero que en la realidad tiene
este tipo de resbalones y que no son otra cosa que una permanente violación a
los derechos de las mexicanas. Una vergüenza.
En ese sentido, Cosío Nava sostiene, con toda razón, que esta defensa al
interior del PRD -que no es sino reflejo de lo que sucede en muchos otros
partidos políticos y en algunos casos con mucha más vergüenza-, tiene el mismo
sentido y es tan importante “como la lucha en contra del IVA, es tan importante
como la defensa del petróleo…”.
Y es tan terrible la respuesta de los señores del poder perredista que las
mujeres, para ejemplo del resto de las militantes de otros partidos, han tenido
que recurrir a los tribunales electorales a fin de solicitar se tutelen los
derechos de las mujeres…pero aún falta que la sentencia, definitiva e
inatacable, se cumpla, como bien señaló la fundadora del PRD, Cosío Nava.
Cuando son señalados estos “reglones torcidos” de la democracia es cuando
nos damos cuenta de lo mucho que falta por hacer para que personas como Jesús
Zambrano y en general la dirigencia nacional del PRD entiendan que los derechos
humanos de las mujeres, como son los derechos políticos, deben respetarse. Hoy
seguramente hay una rebatinga dentro del partido fundado hace 24 años ¿quién o
quiénes se deben ir para que lleguen las mujeres? Un partido que ante tantos
yerros ha dejado en el camino mucho talento, pero sobre todo la esperanza de
miles de mexicanas y mexicanos que creyeron en él; pronto surgieron las
ambiciones, las tribus, los clanes, las familias para acaparar los espacios
políticos y lo peor que antes como ahora, sin las mujeres.
Aunque ya se anunció que habrá consejo nacional el 9 y 10 de agosto, con
toda razón las perredistas ven poca voluntad política, como apuntó Mónica Soto
Elízaga, quien al mismo tiempo ve por una rendija la posibilidad de que la
sentencia emitida por el tribunal electoral, se convierta en un parteaguas en
la vida del PRD.
Como sea, lo que hoy pasa en el PRD, insisto, no es sino el reflejo de lo
que también pasa en otros institutos políticos, donde lo real es la exclusión
de sus militantes. Tal vez valga la pena recordar que a principios del siglo
XXI a algunas priistas de Oaxaca les dijeron que debían bajar de peso si
querían ser candidatas. Otras han revelado que estar en política les ha
representado discriminación constante, sufrir violencia mediática, acoso de sus
compañeros, incomprensión social, esperar muchos años hasta que les toca, ver
pasar las oportunidades y sobre todo gastar mucho dinero, incluso, en los
juicios de protección a sus derechos ciudadanos, para salir de los tribunales
con cajas destempladas, como pasó a más de una en la reciente elección 2013, lo
que todavía no se entiende.
Perfecto indígena
Y ya que estamos hablando de esa inequidad, recordamos el caso de Alejandra
García Morlan, quien ha interpuesto un juicio de protección a sus derechos
ciudadanos en contra del Instituto Estatal Electoral. Pues ahora resulta que
Acción Nacional (PAN), su partido, alega que Perfecto Rubio Heredia, es cuota
indígena y en su defensa, sin guardar la imparcialidad, Juan Mendoza les ha
asignado para su defensa a los abogados del PAN.
Con el chiste que inventó el PAN, Perfecto Rubio Heredia, se convierte en
el hombre de las cuatro mentiras: porque es bastante imperfecto, no es rubio,
los Heredia ni lo reconocen y no es indígena. Es más, se cree que Perfecto
podría cambiar su nombre al de Juanito, porque la jugada es de billar, se trata
de que deje en su lugar a Bernardo Vásquez, su suplente, un favor más del
deslavado PAN para los sin partido.
En fin, como lo hagan, lo cierto es que el PAN intenta con su Perfecto
indígena evadir la cuota de género y por ende la representación equitativa
mujer-hombre en el congreso. Nada extraño
Otra de elecciones y de violencia contra las mujeres ¿alguien puede
entender esa posibilidad de que el presidente municipal electo de San Agustín
Amatengo, Lenin Raymundo Carballido Morales, podría salir libre bajo fianza?
¿Qué la Procuraduría General de Justicia del Estado buscará reactivar el
proceso por el delito de violación tumultuaria? ¿En qué momento dejaron de lado
la acusación de violación tumultuaria, que lo llevó a cometer los otros
delitos, que no son graves: uso de documentos falsos y falsedad de
declaraciones? Es decir, en este caso si aplicó eso de que muerto el perro se
acabó la rabia. Aunque aquí el perro sigue vivo ¿Por qué no aplicar esa lógica?
Y ante este tipo de hechos me pregunto ¿Dormirán tranquilos Gabino Cué y
los tres López: Anabel López de IMO, el procurador Manuel de Jesús López, y el
secretario de Seguridad Pública, Marco Tulio López?
@jarquinedgar
caracolasfem.blogspot.com