Pena máxima para
el asesino de su hijo exige madre de Gamaliel
· Más de tres
años en espera de justicia
· Convoca a
una marcha este miércoles 27 de agosto
Soledad JARQUÍN EDGAR
Vicenta García López madre de Gamaliel un pequeño de
seis años, asesinado el 8 de julio de 2011 en la población de San Mateo Piñas,
pide que las autoridades le impongan la pena máxima al presunto responsable del
homicidio del niño que fue violado, torturado y acuchillado por Julio César
Martínez Ruiz.
Anunció que el próximo miércoles, fecha en que se
realizará la última audiencia, a las 12 horas hará una marcha desde el mercado
zonal de Las Flores hacia el Juzgado Penal donde se realizará la audiencia, “no
estoy sola como la familia de Julio César
piensa” y asegura que la justicia debe ser aplicada con todo rigor.
Pese a las amenazas de muerte que el padre del
presunto asesino, Gregorio Ruiz García, ha hecho sobre toda su familia en caso
de que su hijo no sea absuelto, Vicenta García señaló que durante tres años y
dos meses la justicia ha sido lenta y el proceso un calvario donde los Martínez
Ruiz han hecho alarde de su poder, influencias y dinero para que su hijo no sea
castigado.
El próximo miércoles 27 de agosto, el en Juzgado
Tercero de lo Penal, la jueza Betzaida Cruz Mendoza, atenderá la última
audiencia de este caso y en será en los siguientes días cuando finalmente se
conozca la sentencia que se impondrá a “esa bestia que asesinó a mi único
hijo”, expresa con desesperación.
Explicó que tras la desaparición del niño aquel 8 de
julio de 2011, varias personas la ayudaron a buscarlo, testigos le dijeron que
lo vieron con Julio César Martínez Ruiz, además una compañera de clase afirmó
que Gamaliel le dijo que se iría con Julio César en su caballo. Lo que
presumiblemente sí sucedió ya que el niño y Julio César se conocían, por lo que
se lo llevó con engaños para asesinarlo cruelmente y después tirar el cuerpo en
un barranco, narra entre sollozos la madre de Gamaliel.
“Estoy muerta en vida, pero tengo que vivir para ver
que reciba la pena máxima”.
Ese día, casi de inmediato empezó a buscar al niño,
preguntó entre la gente y como le dijeron que se había ido con Julio César,
junto con otros padres de familia acudió a su casa, donde el abuelo Sixto Ruiz
Ortiz, les expresó que no lo molestaran que estaba borracho, dormido y que
había llegado lastimado, pues su camisa tenía sangre.
Expone que durante el proceso la familia del presunto
asesino se ha dedicado a comprar testigos, entre sus propios familiares, así
como los servicios de un médico de nombre David Chávez López quien extendió una
receta en esa fecha y argumentó que atendió al presunto responsable en su
consultorio de la capital oaxaqueña.
Ella pensó que tal vez el niño estaba perdido pero fue
encontrado muerto en un barranco horas después, “desde entonces no tengo vida,
se me acabó, si estoy de pie es porque quiero justicia para mi hijo”, reitera
una y otra vez al tiempo de anunciar que no se amedrenta ante las amenazas de
Gregorio Ruiz García.
“Para la jueza
Julio César Martínez Ruiz es presunto responsable del asesinato de mi hijo,
para mi es el responsable, fue él quien lo asesinó, a él señalaron los vecinos
y amigos de mi hijo como la persona con la que se fue Gamaliel ese día al salir
de la escuela y si hubiera pena capital la pediría”.
Julio César fue detenido al siguiente día cuando se
presentó al velorio del pequeño Gamaliel y ella exigió al comandante de la
Policía Ministerial que lo detuviera, pese a la oposición del síndico Miguel
Ángel García Sánchez, quien no quería pues el presunto responsable también era
integrante del Cabildo de San Mateo Piñas en ese momento.