Mujeres y política
¿Democracia sin mujeres?
Soledad
JARQUÍN EDGAR
El
proceso electoral inició con el registro de precandidaturas de quienes aspiran
a ocupar una curul en la próxima legislatura de Oaxaca, proceso comicial
marcado por las transformaciones legislativas que pretenden reducir la
desigualdad entre mujeres y hombres que competirán en julio y con ello que más
mujeres tengan alguna posibilidad de ser diputadas.
Posibilidad
que depende de las reglas marcadas en la reforma electoral, pero también como
han señalado las expertas de la voluntad política de los dirigentes de los
partidos políticos y de que las candidatas cuenten con posibilidades reales de
ganar en las elecciones, es decir, que las circunstancias electorales les
favorezcan (que no vayan en distritos donde sus partidos pierden, que cuenten
con recursos suficientes y no solo económicos y que tengan el respaldo de sus
partidos en la contienda).
Esto
quiere decir que efectivamente, como marca la ley electoral estatal (Artículo
152 fracción 7), que de la totalidad de solicitudes de registro, tanto de las
candidaturas a diputados por ambos principios (mayoría relativa o
representación proporcional) que presenten los partidos políticos o las
coaliciones ante el IEEPCO, deberán integrarse al menos el 40 porciento de
candidatos y suplentes de un mismo género, procurando llegar a la paridad de
género.
Siguiendo
la “tradición” en el registro de precandidatos y precandidatas, tanto el PRI
como el PAN y el PRD, se han apegado a la inercia de otorgar la menor
proporción (40 por ciento) a las mujeres y la mayor (60 por ciento) a los
hombres, lo que está más que claro en las listas que ya son del dominio
público, además de aceptar las candidaturas de ellas en aquellos distritos
donde no es nada fácil obtener el triunfo electoral.
Un
ejemplo es el caso del PRI. De 25 precandidaturas, 15 son ocupadas por hombres
y las 10 restantes por mujeres. Solo cinco de esas posibles candidatas tendrían
alguna posibilidad de ganar, considerando que en el anterior proceso electoral
el PRI obtuvo el triunfo en cinco de esos 10 distritos. Todavía habría que ver
cuántas candidaturas serán registradas por el Verde Ecologista de México, que
para variar se une con el PRI en la coalición Compromiso por Oaxaca.
La
coalición Unidos por el Desarrollo ha dispuesto que 11 distritos serán
disputados por un candidato o candidata del PAN; el PRD también competirá en
otros 11 y el PT sólo en otros tres. Lo cual reduce de facto las posibilidades
para muchas mujeres, y en lugar de que sean 10 candidatas como sucedería en el
PRI, tal vez solo sean cuatro en el PRD y PAN y una por el PT (estos son
supuestos considerando el comportamiento añejo de los partidos políticos con
las ciudadanas).
La
competencia interna en el PRD llevó al registro de 160 precandidaturas de
mayoría relativa, 42 de ellas son mujeres, de las que ya es seguro cuatro serán
candidatas. Pero habría que agregar que en 11 distritos compiten 39 mujeres. Es
importante decir que las 42 candidatas competirán con hombres y mujeres, en
cambio hay 10 distritos donde los hombres van sin ninguna contrincante mujer
¿acaso no hay mujeres perredistas en esos distritos?
En
la representación proporcional se registraron 81 candidaturas, 41 son mujeres.
Las cuatro primeras de esa larga lista son mujeres y su inclusión dependerá de
los resultados de la elección, tendrán que esperar a ver qué pasa el 7 de julio
próximo. Pero la que ya podría frotarse las manos es Rogelia González Luis,
actual regidora de Derechos Humanos en Juchitán de Zaragoza.
En
el PAN las cosas no son diferentes, se registraron 55 fórmulas de mayoría
relativa, 18 están compuestas por mujeres, una de las cuales (Diana Perla Peña
Peña) tiene un suplente varón y otras seis mujeres son suplentes de un varón
propietario.
De estas
55 fórmulas el PAN tendrá que eliminar a 44 y si eso fuera poco habría que
aclarar que de las 18 fórmulas integradas por mujeres 14 compiten en sólo cinco
distritos y se me ocurre la misma pregunta que en el PRD ¿entonces cuántas
mujeres van a quedar? Si especulamos,
podríamos empezar a cantar la canción “Yo tenía 10 perritos”, en este caso de
los 18 que tenía, sólo me quedan cinco (distritos), de los cuales cuatro
podrían llegar a la contienda que finalizará en julio y quién sabe cuántas
quedarán.
Todo
ello a pesar de los pesares y de la declaración del presidente del PAN, Juan
Mendoza Reyes que señaló que su partido “es el único partido que contempla en sus estatutos el
tema del género y precisamente
fuimos los diputados de Acción Nacional los que en la pasada
reforma electoral impulsamos que en nuestro Estado se estableciera la cuota de género”, como se
cita en el boletín de prensa del 21 de marzo.
Por
representación proporcional se registraron 46 fórmulas y 20 están integradas
por mujeres. A excepción de la primera
en la lista quien por cierto es Diana Perla Peña Peña, quien funge como
funcionaria del gobierno estatal en el cargo de Coordinadora de la Agenda
Estatal para la Equidad en Educación Básica del IEEPO, el resto de las
precandidatas están situadas más adelante del número siete. Es decir, si no hay
un revolcón de por medio a la lista, esta jovencita ya se puede ver en una
curul de la LXII Legislatura local.
Si
vemos de esta forma las listas de quienes aspiran a tener una candidatura por
mayoría relativa o de representación proporcional, podremos observar lo que
planteaba al principio y que resulta ser el temor principal de quienes
promueven la paridad porque resulta que hay una enorme simulación en los
partidos políticos y coaliciones.
Claro,
falta ver que sucede con los partidos que de manera independiente competirán.
En el PUP, Partido Unificación Popular, dicen que “las mujeres no quieren” que
casi hay que llevarlas al registro de las orejas. Hemos visto experiencias como
la de Nueva Alianza que registra un importante número de mujeres, pero que los
votos no alcanzan para obtener el triunfo. Movimiento Ciudadano en la elección
en busca de la representación en el congreso local sacará agua del pozo, porque
su objetivo es ganar las elecciones municipales de Oaxaca de Juárez con un
candidato “estrella”, mientras el Socialdemócrata de Oaxaca buscará que no se
le ahogue el niño en su primer intento.
Este
2013, como ya sabemos, se cumplen 60 años desde que las mexicanas lograron el
voto universal y con ello el reconocimiento de otro derecho político: ser
electas. En el primer caso, las mujeres son objeto de disputa por parte de los
partidos políticos pues ellas representan una mayoría ciudadana que reúne
responsablemente los requisitos para votar. Pero se regatea si se trata de que
se vote por ellas, lo cierto es que a las mexicanas todavía nos falta mucho.
Por
lo pronto todos hablan de democracia aunque en esta democracia las mujeres no
tengan un lugar claro ni mucho menos el
correcto, la paridad.
Bola de nieve
Es
común que los rumores se conviertan en tormentas de palabras que van y vienen y
que las mentiras que se vierten lleguen a convertirse en “verdades” aún cuando
por todo ello se pase por encima de otras personas y, como en Oaxaca la
política es polaca y la polaca es grilla, todo el mundo se monta en busca de
los afanes protagónicos, del poder real o ficticio, el mediático que se termina
como las noticias sin trascendencia, es decir, al día siguiente, pero que
muchas veces causan daño severo, como un golpe seco.
Eso
es lo que sucede en el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana
(IEEPCO) donde los intereses y la ambición de un grupo de caciques alcanzó
otros intereses y otras ambiciones, en este caso los de Izela Martínez, quien
no sólo acusa, sin pruebas, a la titular de la Dirección Ejecutiva de Sistemas
Normativos, Gloria Zafra, sino que además ha puesto en riesgo el trabajo de
reconciliación entre las comunidades del municipio de Santiago Choápam, donde
la sangre ya corrió alguna vez.
La
ex servidora pública Izela Martínez fue despedida luego de un procedimiento
administrativo, tras acusar a su superior jerárquico de una supuesta falsificación
de documentos, y que de acuerdo con la Contraloría General del IEEPCO no pudo
comprobar porque sus acusaciones carecían de veracidad y, por el contrario, lo
que se comprobó es que Izela Martínez se negó a realizar las funciones que le
correspondían como Secretaría de Actas de la Comisión para la Reconciliación entre las Comunidades del Municipio de Santiago
Choápam.
Cuando pasa esto la pregunta inmediata ¿qué
hay detrás? Por supuesto el interés político y económico de personajes como Dámaso
Nicolás Martínez Ramírez, ex diputado priista, quien responsabilizó a César David Mateos Benítez (ahora el número 142 de
la lista de precandidatos por mayoría relativa del PRD) y otros por la emboscada
en la que fueron asesinados 10 habitantes de San Juan del Río Choápam, hechos que
ocurrieron en mayo de 2011. Ese mismo día Mateos, en conferencia de prensa, se
deslindó de los hechos y en cambio acusó a Martínez Ramírez de pretender
imponer a su hermano Andrés, es exactamente este personaje quien ahora se
aprovecha de las limitaciones humanas de personas como la ex secretaria de
Actas.
Una bola de
nieve que crece entre dimes y diretes, una guerra mediática que se lleva entre
miles de palabras el prestigio de una de las más reconocidas investigadoras,
académicas y servidora pública: Gloria Zafra, a quien pretenden agarrar como
pretexto para seguir engañando a los habitantes de San Juan del Río, imponiendo
su propia ley y viviendo de las ganancias que en Oaxaca otorga ser líder,
grillo o político, como es el caso del ex diputado priista Dámaso Nicolás
Martínez Ramírez, señor de horca y cuchillo en algunos pueblos mixes. Y todo
pasa mientras integrantes del Consejo General del IEEPCO hacen como si nada
pasara, como si el aire de esta infamia no les molestara, porque a quien se
afecta es a otra mujer y como dijera Isidoro Yescas, director del órgano
electoral estatal, es sólo un pleito entre mujeres que no debería quitarles el
sueño (no lo dijo así sino con el lenguaje propio de un macho). Mientras tantos
otros vivales se suben al ring mediático para ver qué les puede tocar en este
reparto de sangre y prestigio, porque insisto no hay política más sui generis
que la oaxaqueña.
@jarquinedgar
www.diezcomunicacion.com.mx