Mujeres y Política
¡No más sangre...por favor!
Soledad JARQUÍN EDGAR
La violencia sigue: el
asesinato de 72 periodistas entre 2002 y este junio 2012 (dato de Artículo 19),
y con sus víctimas la violación permitida de los derechos humanos de Libertad
de Expresión y de Información. Y habría que decir, que el 10 por ciento de
estos asesinatos han sido perpetrados contra mujeres periodistas.
¿Crímenes de Estado? Sin
duda que sí, en tanto persista como característica fundamental de todos ellos,
la impunidad, ninguno ha sido aclarado. ¡Ninguno!
Como dicen las colegas
veracruzanas tienen miedo, no es para menos, junto al cadáver de Víctor Manuel
Báez, asesinado esta semana, una nota que advertía: “éste mes va a ser el peor
para los reporteros” y con Báez suman ya quince los asesinatos de periodistas
cometidos en tierras veracruzanas, de los que cinco de ellos han sucedido tan
solo en los últimos 45 días, desde lejos no acabamos de salir del horror de la
muerte de Regina Martínez, cuando siguieron los otros y la memoria de otros
tantos cometidos los años anteriores, y se encendieron las alarmas, la tragedia
creció, pero para nuestra pena, también aumentó el tamaño de la impunidad, la
falta de castigo.
Ellas y ellos tienen
miedo, su miedo se extiende, nadie está a salvo mientras el ejercicio de
informar sufra esta especie de abandono, está orfandad, porque la nobleza del
periodismo es seguir, es investigar, llegar hasta lo último. El periodista es
una o un observador silencioso; no hace sombra como los árboles pero sigue o
persigue, según el caso; en suma acompaña. Pero con las y los periodistas,
nadie, y si le añadimos el reconocimiento de un gremio desestructurado,
dividido, pulverizado, individualizado por formación, nos daremos cuenta que
estamos solas y solos ¿quien más, además de las y los propios periodistas? ¿Quién
más protesta o exige? ¿Quién más se queja? ¿Quién acompaña a pesar del tamaño
de la tragedia?
Por eso es que por cada
golpe, por cada herida, por cada bala que quema la carne, todo se detiene, el
corazón y el cerebro, se interrumpen las palabras, se terminan las ideas, se
prohíbe hablar y escribir, se impide la verdad subjetiva, pero verdad al fin,
se somete la libertad de toda la gente, se oprime la expresión, se callan los
floresmagón, los manuelbuendía, lasreginasmartínez quienes nunca vuelven… ¿Nos
daremos cuenta? O seguiremos escribiendo cartas sin destino, a nadie, que sólo
digan: ¡No más sangre...por favor!
DEL OPORTUNISTA
Entre el cuchi cuchi de la candidata presidencial
del Partido Acción Nacional, Josefina Vásquez Mota, y el huracán Carlota no sé
realmente que es peor.
Carlota deja ya para la
noche de este viernes dos niñas muertas y una madre agonizante, pobres entre
las pobres, como siempre.
Deja también muchos otros
desastres, como el oportunismo de algunos políticos que en campaña, desde la
comodidad de sus casas y lujosas oficinas se ocupan de las redes sociales, para
mostrar, exhibir y presumir lo pronto
que actúan “para ayudar a los damnificados”.
Uno de ellos, Héctor Pablo
Ramírez P. Leyva quien a través tweets
se dirige a la gente de “su distrito”, aunque claro está, pocos lo leerían
porque a diferencia del diputado priista, los que viven en las tierras
afectadas por Carlota no tienen acceso a las redes sociales y están frente a
una emergencia, luchando por salvar sus vidas, sus bienes.
Pero Héctor Pablo que es
de esos personajes que se sienten hechos mano, del grupo privilegiado, protegido de los por los dioses del Priolimpo,
tenía que hacer algo, ocuparse, moverse, actuar, “trabajar” y sí se puso a tweetear, aquí un seguimiento rápido de
su inmediato oportunismo, porque lo que hizo no sirve para nada:
A las 11:06 pm dijo a
través su cuenta:
Mi solidaridad siempre con
mi distrito, el más afectado por el Huracán hoy, buscaremos mecanismos d apoyo
inmediato a quienes perdieron todo.
Un minuto más tarde
añadió:
La tierra de mis padres
Pluma Hidalgo fue uno de los municipios más afectados, trabajaremos a partir de
ya para enviar apoyo inmediato.
Al siguiente minuto:
Nos informan que varias
palapas frente a la playa en Puerto Angel, Zipolite y Mazunte fueron afectadas
por las intensas lluvias.
Para las 11:24 pm de este
viernes, volvió a escena virtual:
Me comuniqué con el
Gobernador @GabinoCue para ofrecer
todo el apoyo necesario y pedirlo a su vez para Pluma Hidalgo, agradezco su
atención.
Sin evaluación, aconsejó a
Gabino y gabinetazo:
El @GobOax necesitará de recursos adicionales
del Fonden para apoyar a las comunidades afectadas.
Para las 11:48 el político
priista invitaba a Felipe Calderón, tal vez después diría a la gente de “su
distrito” que hizo una gestión importante:
Los Oaxaqueños invitamos
al Presidente @FelipeCalderon
para supervisar los daños en la costa, será bienvenido su apoyo.
¿Quién en campaña puede
desperdiciar la oportunidad siendo apenas las 11:58 pm:
Acabo de entrar a la 102.3
FM de la región de la costa de Oaxaca para manifestarles nuestra solidaridad y
apoyo para atender a “danmificados”.
Ojo, escribió “danmificados”
y no damnificados, pero bueno, qué se puede hacer en estos casos donde el
analfabetismo es funcional y totalmente estructural.
A las 12:28 pm ya estaba
pidiendo auxilio:
En el Centro de Salud de
Pluma Hidalgo está una mujer lesionada de la cadera debido a un deslave urge
una ambulancia. @goboax
¿Después qué? A dormir, ya
había trabajado lo suficiente: se comunicó con el gobernador, invitó a Felipe
Calderón a visitar la zona afectada, recomendó pedir recursos del Fonden, hizo
un llamado a través de la radio, qué más se le puede pedir. Lo cierto es que mucho
ruido y pocas nueces.
Todo se vuelve mediático,
sabrá este diputado con suerte que en este país de más de 112 millones de
habitantes, sólo el 10 por ciento utilizan el tweeter, menos del 10 por ciento de la población total del país.
Claro que no lo sabe, por eso se lo decimos. Sin embargo, sabe que en esta red están
ellos y ellas, la clase política que se muestra “humana” como Héctor Pablo y
que lejos, muy lejos, bajo la intensa lluvia provocada por Carlota están las
mayorías, esas a las que sus tweets
no llegan, al menos por ahora y quien sabe hasta cuando.
DE LA GORRONA
Por eso digo no sé qué fue
peor: el oportunismo que provocó Carlota o la nueva metida de pata de Josefina.
Porque lo que hizo la candidata del PAN no es cosa menor, aunque muchas mujeres
de Mazatlán, Sinaloa, festinaron el chistorete y después siguió la ruta de las redes
sociales. El chistecito de Jose-FIN-a,
no favorece en nada a las mujeres: “…Ay! de aquella pareja que no vaya (a
votar) porque no le hacemos cuchi cuchi en un mes…”
Señora Josefina Vásquez
Mota: las mujeres somos más que cuerpos que hacen “cuchi-cuchi” y tenemos otros
modos para convencer que no forzosamente tienen que ver con eso que usted llama
“cuchi-cuchi”, tal vez es como dicen “la leona cree que todas son de su
condición”. No cabe duda, Jose-FIN-a es parte del free rider, que de acuerdo con la filósofa Amelia Valcárcel, son aquellas
mujeres que viajaron de gorronas, se subieron y llegaron, sin necesidad de nada
más, sin el compromiso con las demás y, peor, cree que no le debe nada a las
feministas.
Se impone la idea del
cuerpo como único instrumento de las mujeres, que los otros pueden hacer como
se les da la gana, por eso la naturalización del uso del cuerpo antes que
cualquier posibilidad de discernir, dialogar, convencer, argumentar por qué es
importante votar por tal o cual persona. Funciona en Jose-FIN-a, sin problema
alguno, el sistema de opresión impuesta por la sociedad patriarcal, que se
adjudica el derecho de acceder al cuerpo de las mujeres para el placer sexual,
como dice la feminista española Ana de Miguel y que Jose-FIN-a remarca con su
sexismo a flor de piel.
Lo que sí es cierto es que
el cuchi-cuchi le quitó de encima el asunto de la utilización de aviones que
presuntamente pertenecen al narcotraficante Francisco “Pacho” Colorado, cosa
que el PAN desmintió y apuntó que eran “taxis aéreos”, como sea, otra vez la
clase política exhibiendo su poder y el dispendio de recursos públicos, porque
ya se nos olvidaron los 52 millones de pobres que hoy mismo esperan otro
México, según datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de
Desarrollo Social, quien también señaló que entre 2008-2010 el número de pobres
creció en 3.2 millones. Los saldos negros de 12 años de conservadurismo, que
además deja miles de muertos, cientos de desaparecidos y desplazados.