miércoles, 3 de julio de 2013

Necesario acelerar el proceso para la igualdad en México: Patricia Mercado


Foro de Iniciativa SUMA en Hermosillo
Necesario acelerar el proceso para la
igualdad en México: Patricia Mercado
| Urge a tomar medidas para integrar a más mujeres en espacios de decisión | Mujeres encabezan sólo 7% de las presidencias municipales de México | Se reúne en Sonora con políticas electas por distintos partidos
 La directora de la Iniciativa SUMA, Patricia Mercado, advirtió este miércoles en Hermosillo sobre la necesidad de acelerar el proceso de igualdad entre mujeres y hombres en México, por lo que urgió a tomar medidas para integrar más mujeres en espacios de decisión en la vida política y económica del país. 
Al inaugurar en esta ciudad el foro “Tu, yo, nosotras… ¿Hacia dónde vamos?”, dirigido a reflexionar sobre las estrategias para lograr una mayor participación femenina y la representación política equilibrada de mujeres y hombres, la dirigente aseguró que se necesitan acciones especiales para transformar a un país tan desigual como México 
.Ante cerca de 70 mujeres líderes de distintos partidos políticos, quienes en la pasada contienda electoral local de 2012 fueron candidatas a diputadas, presidentas municipales o síndicas, la ex aspirante presidencial les pidió actuar para facilitar que más mujeres lleguen a puestos en los que puedan tomar decisiones, como una responsabilidad con la construcción de un mejor estado.
El foro “Tu, yo, nosotras…”, que se desarrolla en un hotel de esta ciudad, fue convocado por Iniciativa SUMA, el Instituto Nacional de las Mujeres, el Fondo para la Igualdad de Género de Naciones Unidas, la oficina de ONU Mujeres en México, el Instituto Sonorense de la Mujer, la Junta Local Ejecutiva del IFE en el Estado de Sonora y el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana.
Ahí, Manuel Contreras, representante de ONU Mujeres, aseguró que México ha logrado importantes avances gracias a medidas afirmativas, ya que de 2009 a 2012 creció el número de mujeres de 18 a 25 por ciento en la Cámara de Diputados y de 8 a 29 por ciento en el Senado, pero reconoció que solo siete por ciento de las presidencias municipales del país son encabezadas por mujeres.
La igualdad de género depende del compromiso de todas y todos para reconocer que tenemos iguales capacidades y ampliar las oportunidades de las mujeres de tomar decisiones en las familias, el gobierno, la sociedad, las empresas, los partidos políticos y en todos los ámbitos de la vida, expresó el funcionario internacional. 
La Directora de Participación Política del Instituto Nacional de las Mujeres, Paula Soto Maldonado, dijo el reto es hacer que más mujeres participen en la vida pública no sólo como candidatas, sino en el ejercicio del cargo para el cual se postularon, y consideró como una prioridad estratégica trascender las brechas de género y garantizar una igualdad sustantiva entre mujeres y hombres.
Por su parte, Eduardo Manuel Trujillo Trujillo, vocal ejecutivo de la Junta Local del IFE, indicó que los avances sustantivos hacia la igualdad entre mujeres y hombres se dieron apenas en años recientes, pues la cultura y la carga jurídica retrasaron el logro de la representación igualitaria, por lo que invitó a que sea desde los partidos donde se hagan los ajustes estatutarios para que se cumpla la ley.
Dolores Alicia Galindo, directora del Instituto Sonorense de las Mujeres, expuso que mientras hay mujeres luchando por espacios de elección, hay muchas más mujeres que luchan por su supervivencia y la de sus familias, y es por eso que las que están en puestos de toma de decisión tienen un compromiso mayor con ellas. 
En su mensaje de inauguración, el consejero presidente del Consejo Estatal Electoral, Francisco Javier Zavala Segura, consideró la sentencia dictada por el Tribunal Electoral como un parteaguas en torno al acceso de las mujeres a las candidaturas a puestos de elección popular, y llamó a modificar el COFIPE y determinar qué se entiende por proceso democrático, para trabajar en las próximas elecciones de Sonora que inician en octubre de 2014.
En la reunión a la que asistieron dirigentes de partidos, presidentas municipales, diputadas, consejeras electorales, así como mujeres militantes de las distintas fuerzas políticas de Sonora, se analizó qué acciones, alianzas, reformas legislativas y políticas públicas son necesarias para lograr una mayor presencia de mujeres en los espacios de toma de decisión en los siguientes procesos electorales, tanto a nivel federal como local.
SUMA, es un proyecto plural de organizaciones sociales que busca fortalecer la participación política y promover el empoderamiento económico de las mujeres, mediante la aplicación efectiva de la Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres y el Código Federal para las Instituciones y Procesos Electorales (COFIPE), para coadyuvar en la participación y representación política equilibrada de las mujeres y los hombres y la igualdad en la vida económica nacional.

Letras violeta: Daniela y Virginia, seis años de silencio

LETRAS VIOLETA
Daniela y Virginia, seis años de silencio

Soledad JARQUÍN EDGAR
A seis años de la desaparición de Daniela y Virginia Ortiz Ramírez, entonces de 14 y 20 años de edad, lo único que su familia ha recibido es silencio, nada en concreto, ninguna respuesta porque no hubo ninguna investigación.
Daniela y Virginia, hermanas que seguramente se siguen acompañando en la ausencia forzada, atadas de manos y con los ojos vendados, como revelaría un testigo que las vio pasar y que identificó a sus captores: Miguel Ángel Velasco Álvarez, Francisco Herrera Merino, Timoteo Alejandro Martínez, José Ramírez Flores.
Ahí están, en el silencio del territorio en disputa, en el silencio de las autoridades que nada dicen, que nada hicieron y que nada hacen para responder a la misma pregunta que durante los últimos seis años, de noche o de día se hace su madre Antonia Ramírez: ¿dónde están mis hijas?
Virginia y Daniela crecieron en la desolada mixteca, en los territorios donde el viento es frío y seco, y donde la mirada se pierde entre las montañas que cobijan caseríos sencillos y eminentemente pobres, abandonados a su suerte ante la incapacidad de conciliar al pueblo triqui. Pobreza que se presume, que vende regalías a los gobiernos.
La ausencia de Daniela y Virginia, el dolor de Antonia y del resto de la familia se respira inquieto en el mismo territorio que ha despertado la codicia de caciques, de políticos, de falsos redentores, de grupos comandados por hombres que para castigar al enemigo no dudan en tomar a las mujeres como el preciado trofeo de las pírricas victorias.
Conflicto que ha provocado violencia y más violencia, asesinatos, emboscadas, violaciones sexuales, despojos, depresión, aislamiento, migraciones forzadas hacia el norte del país, desplazamientos al corazón de la capital oaxaqueña, donde como Virginia y Daniela, el pueblo Triqui se vuelve invisible, inexistente, imposible de escuchar, imposible de conciliar…
Antonia Ramírez apenas rebasa los 50 años, el silencio e incapacidad de las autoridades ha sido para ella una marca que se hace más profunda por cada minuto que ha pasado en los últimos seis años, desde el 5 de julio de 2007, el día en que por última vez vio a sus hijas, lo que ha sido de su existencia desde aquel día es agonía.
Frente al dolor de una familia, la autoridad representada entonces por el gobernador Ulises Ruiz, redujo la desaparición de la estudiante de secundaria y de la maestra bilingüe como una consecuencia del conflicto interétnico, una venganza entre familias y aunque se sabían los nombres de los presuntos responsables nadie fue detenido entonces. Se cobijó la impunidad y la violencia machista.
El cambio de gobierno llenó de esperanza a la familia. El 20 de diciembre de 2011 había un primer resultado, cuando la PGJE anunció, con bombos y platillos, la detención de Miguel Ángel Velasco Álvarez, presuntamente uno de los perpetradores del secuestro de las hermanas Ortiz Ramírez cuando se trasladaban de Xinicuesta a Juxtlahuaca, a casi dos años de aquel suceso nada se sabe del paradero de Virginia y Daniela, de nuevo el silencio.
No importan ¿por qué son pobres? ¿Por qué son mujeres? O ¿por qué son indígenas? ¿Por qué no importan Daniela y Virginia para que se activen les mecanismos de investigación? ¿Por qué…?
Virginia y Daniela Ortiz Ramírez representan seis años de silencio, de complicidad o de incapacidad y revelan que la justicia solo se alcanza en otras condiciones.
@jarquinedgar 






Comunicado de familiares de Daniela y Virginia





Comunicado de familiares de Daniela y Virginia

A LAS ORGANIZACIONES SOCIALES, DEMOCRATICAS Y REVOLUCIONARIAS
A LA OPINION PÚBLICA ESTATAL Y NACIONAL
A LA OTRA CAMPAÑA
A LAS COMUNIDADES MILITANTES DEL EZLN

                 Los problemas de miseria que vivimos todos, surgen de la ambición desmedida de poder y de dinero que tiene la clase económica y política que domina en el país: mediante la explotación desmedida de  millones de hombres y mujeres que trabajan jornadas extenuantes a cambio de un salario miserable; con reformas a la constitución a conveniencia de los rateros de cuello blanco, pensando siempre en sus intereses impulsan la privatización de la educación y de los recursos naturales estratégicos del país, como el petróleo, gas, electricidad, para obtener jugosas ganancias a costa del sufrimiento del pueblo. No les basta saciar su ambición con el poder político que tienen cuando crean una farsa electoral, de partidos comparsa que hacen pactos denigrantes en el nombre de México. “LOS VOTOS NO ACABAN CON EL HAMBRE Y LA MISERIA DEL PUEBLO”
                 Ante este panorama gris, lleno de nubarrones y de lodazal donde se revuelcan los traidores al pueblo, no nos queda otra más que luchar y organizarnos hasta encontrar en los corazones y en las mentes de todos los herman@s pobres como nosotros, la coincidencia para avanzar y demostrar nuestra fuerza para quitarlos del poder autoritario y corrupto que les da privilegios y placeres no importándoles jamás que miles de niños caminen descalzos por las montañas o en el asfalto o mueran de frío por el implacable clima.   
               Este 5 de julio, se cumplen 6 años de la desaparición de nuestras hermanas Daniela y Virginia, de apellidos, Ortiz Ramírez, no hemos cesado de buscarlas ni lo haremos jamás. Exigimos a la brevedad posible una audiencia con el ejecutivo estatal para que las instancias de justicia saquen de los rincones polvorientos de las mazmorras represivas,  los expedientes que hablan de nuestros familiares y LOS FUNCIONARIOS se pongan a trabajar desquitando los grandes sueldos que reciben.

¡¡¡SI NO ESTAN DANIELA Y VIRGINIA, NO ESTAMOS TODAS!!!
¡¡¡VIVAS SE LAS LLEVARON, VIVAS LAS QUEREMOS!!!
FRATERNALMENTE
FAMILIARES DE DANIELA Y VIRGINIA