jueves, 2 de diciembre de 2010

ENTREGAN CONACYT, CCC y AMC BECAS PARA MUJERES EN LAS HUMANIDADES Y CIENCIAS SOCIALES

Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/125/10
México, D. F., a 2 de diciembre de 2010




  • Erica Elena González, del CIESAS de Oaxaca, y Abigail Rodríguez, de la UAM Xochimilco, las ganadoras de la primera edición


La Academia Mexicana de Ciencias (AMC) entregó las Becas para Mujeres en las Humanidades y las Ciencias Sociales, reconocimientos que por primera vez se conceden con el apoyo del Conacyt y del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República, así como con la colaboración de L´Oréal y la Unesco.

En esta su primera emisión las ganadoras fueron en el área de Humanidades la Dra. Erica Elena González Apodaca, del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), Unidad Pacífico Sur, en Oaxaca, con el proyecto “Juventudes étnicas, interculturalidad y educación. Significados socioculturales y políticos en jóvenes trabajadores, profesionistas y maestros indígenas”.

Mientras que en Ciencias Sociales la galardona fue la Dra. Abigail Rodríguez Nava del Departamento de Producción Económica de la UAM-Xochimilco, con el proyecto “Efectos de la política monetaria y de los mercados financieros sobre el sector real de la economía”.

La entrega de las becas, consistentes en un premio económico de 100 mil pesos para apoyar la investigación, estuvo a cargo del Dr. José Antonio de la Peña, director de Investigación del Conacyt, del Dr. Jorge Flores Valdéz, coordinador general del Consejo Consultivo de Ciencia de la Presidencia de la República, y del presidente de la AMC, Dr. Arturo Menchaca Rocha.

“Esta premiación permite revisar brevemente el problema de la escasez de científicas en nuestro país. En el espíritu de corregir el desequilibrio de género a través de estímulos específicos para mujeres científicas, la AMC ha propuesto en varios foros mecanismos para favorecer la contratación de algunas de esas jóvenes que hoy se pierden en una batalla que sabemos desigual”, dijo Menchaca Rocha previo a la entrega de los premios.

Añadió que de manera concreta se sugirió a la SEP y Conacyt consideren instaurar un programa de retención y repatriación para mujeres científicas, así como la petición que hizo al Gobierno del Distrito Federal y al Instituto de Ciencia y Tecnología del DF para que implementen un programa de becas postdoctorales dirigidas al mismo sector.

Las Becas para Mujeres en las Humanidades y las Ciencias Sociales nacieron por idea y gestión de la Dra. Rosaura Ruiz, ex presidenta de la AMC y actual directora de la Facultad de Ciencias de la UNAM, preocupada por promover y apoyar la investigación científica realizada por mujeres mexicanas en estas áreas de conocimiento.

La tradicional comida anual de fin de año que la AMC organizó para sus investigadores miembros sirvió de marco para la entrega de estas becas, en medio de un ambiente de camaradería entre los científicos reunidos en las instalaciones de la Academia, quienes aprovecharon este encuentro para convivir, compartir y refrendar compromisos al interior de la comunidad.

9º. Seminario Internacional de Violencia Familiar en el DF


Políticas Públicas y Programas en casos de Violencia Familiar de Alto Riesgo

• A revisión los protocolos de atención que se implementan en los refugios para mujeres víctimas de violencia de alto riesgo

• Especialistas de Chile, Ecuador, España, Estados Unidos y México, formulan recomendaciones para mejorar las políticas públicas y programas en casos de violencia familiar de alto riesgo

Es una constante: las mujeres que son víctimas de maltrato se ven sometidas a actos reiterados de violencia, a grado tal que el 70 por ciento de quienes son golpeadas por sus parejas vuelven a experimentar uno o más incidentes similares en el lapso de un año; el 60 por ciento de las que son agredidas con arma blanca o arma de fuego por sus parejas vuelve a sufrir un acto de violencia similar, en el mismo lapso.

Con base en los datos del INEGI, en el transcurso del 2005, se registraron dos mil 159 fallecimientos de mujeres por violencia familiar. Dos terceras partes de las mujeres asesinadas, murieron a consecuencia de agresiones en el hogar que fueron perpetradas por un hombre.

Más allá de las cifras, la violencia familiar, es resultado de un acto abusivo de poder dirigido a dominar, someter, controlar o agredir de manera física, verbal, psicológica, patrimonial, económica y sexual, dentro o fuera del domicilio familiar a las y los integrantes del núcleo familiar.

La violencia familiar, generalmente es perpetrada por el hombre en contra de la mujer, y de manera particular entre cónyuges o personas que han tenido alguna relación de parentesco (padres, hermanos, hijos) o de afinidad (matrimonio, concubinato o que mantengan una relación de hecho).

Debido a que la violencia hacia las mujeres es una situación generalizada que no distingue raza, clase, religión ni edad, el Comité para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujeres (CEDAW, por sus siglas en inglés), en su Recomendación General 19, establece que la violencia contra la mujeres es una forma de discriminación que impide el goce de derechos y libertades en condiciones de igualdad. Asimismo, sugiere la adopción de políticas que erradiquen la violencia y fomenten la igualdad entre mujeres y hombres.

En tal sentido, y conforme a la Ley de Asistencia y Prevención de la Violencia Familiar para el DF, la Secretaría de Desarrollo Social tiene el mandato de fomentar instituciones u organizaciones públicas o privadas cuyo objeto social coadyuve a la prevención de la violencia intrafamiliar o brinden albergue a las y los receptores de la violencia familiar.

Los albergues y casas de emergencia, que son operados por la Dirección de Igualdad y Diversidad Social del DF, surgen de los altos índices de violencia contra las mujeres, niñas y niños, en el ámbito familiar. Su objetivo es brindarles protección en situaciones de extrema peligrosidad, así como atención especializada e incluso herramientas para recuperar su autoestima, salud mental e incluso formación para incorporarse al mercado laboral que les permita su independencia económica.

Un Seminario Internacional

A pesar de la existencia de estos sitios de refugio, adonde las mujeres acuden para proteger su vida y la de sus hijos, el riesgo de muerte a manos de su agresor es latente. En la mayoría de los casos, los mecanismos para medir el riesgo y el grado de peligrosidad del agresor son insuficientes. Por ello se hace necesaria la revisión de los protocolos, programas y políticas públicas que permitan superar la situación de violencia familiar de alto riesgo.

De tal suerte, especialistas de Chile, Ecuador, España, Estados Unidos y México, convergen en el 9º Seminario Internacional Políticas Públicas y Programas en casos de Violencia Familiar de Alto Riesgo, que se lleva a cabo en la ciudad de México los días 29 y 30 de noviembre de 2010, en el Instituto de Investigaciones Antropológicas.

Los objetivos son: analizar los protocolos de atención que operan en los diferentes refugios que trabajan con violencia familiar de alto riesgo, así como generar y unificar criterios y estándares de calidad en los refugios, además de abordar problemáticas como la formación de personal y agentes sociales que atienden dichos establecimientos, así como los retos para las políticas públicas en casos de violencia familiar de alto riesgo.

El 9º Seminario Internacional es organizado por el Consejo para la Asistencia y Prevención de la Violencia Familiar, órgano honorario, de apoyo y evaluación, de acuerdo a lo establecido en la Ley de Asistencia y Prevención a la Violencia Familiar del Distrito Federal, y se realiza en conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres y las Niñas. El fin es propiciar un espacio de reflexión y acción interinstitucional e interdisciplinaria en torno al tratamiento de la violencia.

El seminario está dirigido a quienes integran el Consejo para la Asistencia y Prevención de la Violencia Familiar, los Consejos Delegacionales, personal de las Unidades de Atención y Prevención de la Violencia Familiar, de albergues y refugios que trabajan con mujeres violentadas, comunidad académica, organismos no gubernamentales y público interesado en el tema.

Presiden la inauguración el Dr. Carlos Serrano Sánchez, Director del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM; del Lic. Martí Batres Guadarrama, Secretario de Desarrollo Social, y la Mtra. María Elena Ortega, Encargada de la Dirección General de Igualdad y Diversidad Social.

Requieren capitalinas más refugios contra violencia familiar de alto riesgo

Al inaugurar el 9º Seminario Internacional de Violencia Familiar del Distrito Federal, María Elena Ortega Hernández, encargada de la Dirección General de Igualdad y Diversidad Social del Distrito Federal, afirmó que frente al aumento de la violencia familiar contra las mujeres, son necesarias políticas públicas que contemplen la creación y perfección de más espacios de protección y tratamiento adecuado.

Con el tema de Políticas Públicas y Programas en casos de Violencia Familiar de Alto Riesgo, esta novena edición será un espacio de análisis de acciones que contribuyan a generar y fomentar iniciativas de políticas públicas y programas integrales para la construcción de una vida digna, con respeto, libre de violencia, detalló la servidora pública del gobierno de la ciudad de México.

Ante el secretario académico del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Luis Alberto Barba Pingarrón, y de Elia Tello, Agregada Cultural Adjunta de la Embajada de Estados Unidos, la funcionaria capitalina presentó estadísticas sobre la violencia de género hacia las mujeres y aseveró que frente a esa realidad se requieren cada vez más espacios de protección, como los refugios, así como el perfeccionamiento de los modelos de atención y avanzar en las medidas de protección frente a la creciente violencia familiar que hay en el país entero.

Como ejemplo citó que en 2009, la Red de Unidades de Atención y Prevención de la Violencia Familiar de las 16 Delegaciones del D.F. atendieron a 109 mil personas, de las cuales más de 23 mil fueron atendidas de manera integral por violencia familiar.

También en esta ciudad, el Refugio para Mujeres que viven Violencia Familiar y sus Hijas e Hijos, recibió a 113 mujeres que con sus familias formaron un total de 302 mil personas, en tanto que a la Casa de Emergencia llegaron 125 personas más.

En total en la ciudad de México fueron atendidas 427 personas por violencia familiar de alto riesgo en el Sistema de Atención y Prevención de la Violencia Familiar. La encargada de la Dirección General de Igualdad y Diversidad Social indicó que datos oficiales refieren que dos terceras partes del registro de mujeres fueron asesinadas por sus propios maridos, novios, hermanos, amigos, familiares y otro tipo de parientes, es decir, esta violencia extrema ocurrió en el hogar.

Ortega Hernández apuntó que el peligro que corren mujeres y niñas en el ámbito familiar es evidente, por lo que se requieren cada vez más espacios de protección y tratamiento adecuado, como los refugios, de acuerdo como lo marca la Ley General y la Ley de Acceso de las Mujeres a una vida libre de violencia para el D.F. y cada Estado del país, por ello, destacó la trascendencia del 9º Seminario Internacional de Violencia Familiar del D.F.

Por otra parte, María Yuriria Alvarez Madrid, Coordinadora General de Participación Ciudadana en la Fiscalía Especial para los Delitos contra las Mujeres y Trata de Personas de la Procuraduría General de la República (FEVIMTRA), se refirió al modelo de Refugio de Alta Seguridad, en el que se atiende a mujeres en riesgo resultado de la trata de personas, sin embargo, aseguró que el 95% de las víctimas habían sido previamente violentadas por sus propias familias.

Señaló que se ha avanzado en la sensibilización y capacitación a personal, como los agentes del Ministerio Público, y se desarrollan herramientas con enfoque de género que dan a las mujeres protección integral que evita que sean revictimizadas, se les fortalece para el proceso de denuncia y se les da acompañamiento en todo momento.

Uno de las herramientas que aporta este modelo es la reconstrucción desde la antropología social y desde una perspectiva de género de la historia de vida de las mujeres que han sido víctimas de la trata de personas, lo que permite su empoderamiento personal y facilita la investigación cuando procede, refirió la especialista, autora de varias investigaciones sobre el tema.

En el caso de Ecuador, ocho de cada 10 mujeres viven violencia familiar. Del total de asesinatos reportados en la prensa contra mujeres, 59% ocurrieron dentro de sus hogares y sus victimarios fueron sus parejas o ex parejas, señaló Nohemí Marlene Villavicencio Sarmiento, directora de la Casa de Acogida María Amor de la región sur de ese país que también cuenta con una Red Nacional de Refugios.

En la primera mesa de la 9º Seminario Internacional de Violencia Familiar del D.F. participaron también el director general de Por el Gusto de Saber, Centro de Orientación Familiar, Rogelio Araujo Monroy, y la Directora General de Madres Unidas a favor de los Niños, quienes plantearon la problemática que se enfrenta en las instituciones y propusieron algunos mecanismos de atención especializada en violencia familiar y mujeres adictas, así como el vínculo que existe entre madres-hijos e hijas.

El Seminario que se realiza este lunes 29 y martes 30 de noviembre en el auditorio del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM, reúne a expertas de México, Centroamérica y Sudamérica y se efectúa en los 16 días de activismo para erradicar la violencia contra las mujeres. La temática apunta a que, pese a la existencia de refugios, es latente el riesgo de muerte a manos del agresor. En la mayoría de los casos, los mecanismos para medir el riesgo y el grado de peligrosidad del agresor son insuficientes.