Como país democrático:
México debe rechazar la violencia contra las mujeres
· * Concluyó el Diplomado Internacional de Estudios de las Mujeres,
Feminismo y Descolonización, se gradúan 60 mujeres y un hombre
En
nuestro país tienen que desaparecer la violencia contra las mujeres, el
feminicidio, el que las mujeres sean presas por abortar, la violencia sexual,
el incesto contra niñas, la violencia psicológica, la explotación económica si
decimos que nuestro es un país democrático y que en el prevalecen los derechos
humanos como se establece en la constitución, sostuvo la doctora en
Antropología, Marcela Lagarde y de los Ríos al dictar la conferencia La Belleza
y la Paz, Democracia, Género y Etnicidad.
Dentro
de las actividades de clausura del Diplomado Internacional Estudios de las
Mujeres, Feminismos y Descolonización, que concluyeron 60 mujeres y un hombre,
Lagarde y de los Ríos pidió a las que son funcionarias “no ser ignorantes ni
omisas de género como si las que tenemos enfrente fueran marcianas, tenemos que
actuar para las mujeres ávidas de vivir investidas de derechos humanos, esa es
la gran tarea de las feministas”.
Lo
anterior en relación con la obtención de la libertad de Adriana Manzanares,
indígena tlapaneca, presa en una cárcel durante seis años por abortar, luego de
ser acusada por una asamblea popular en el municipio de Ayutla de los Libres,
Guerrero, en “una asamblea popular, ejerciendo violencia comunitaria brutal, sin
siquiera la posibilidad de tener defensores, defensoras, no podemos permitir
que continúen en nuestro país esos hechos, tenemos que hacer que se cumplan las
leyes que hemos ido aprobando sobre todo en la última década”.
Por
ello, resaltó la importancia de los diplomados como el Internacional de
Estudios de las Mujeres, Feminismos y Descolonización para que “haya
funcionarias que tengan conciencia de género, pero que también conozcan la perspectiva
de género, la justicia, la salud, la educación, la gobernanza democrática del
siglo XXI”.
En
ese sentido recordó a la filósofa Hannah Arenth quien señaló que el primer
derecho humano es el derecho a tener derechos y dijo que esta no ha sido una
tarea fácil, “hemos vivido construyendo derechos que no teníamos y que la
sociedad nos regatea y seguimos en eso, pero somos las feministas constructoras
de derechos”.
Lagarde
y de los Ríos aseguró que el Diplomado Internacional de Estudios de las
Mujeres, Feminismos y Descolonización fue un aporte enorme por llevar a las
aulas universitarias una de las concepciones que más ha trastocado el mundo y
que más ha revolucionado la modernidad: el feminismo que no es una etiqueta
ideológica sino una concepción del mundo y de la vida, de más de tres siglos en
occidente y un siglo de manera global.
Hizo
un amplio recuento de lo que el feminismo ha aportado a las sociedades
contemporáneas y señaló los muchos obstáculos que se ha encontrado, como el
hecho de que se tenga que aprender feminismo fuera de la academia y que la
educación desde la infancia hasta la universitaria esté sesgada, porque solo
aprendemos un pensamiento androcéntrico, unilateral sobre el mundo, estudiamos
solo autores hombres, muchos de ellos machistas, patriarcales y misóginos,
además de racista.
Ponderó
entonces el diplomado que concluyó en la Facultad de Derecho y Ciencias
Sociales de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca, que “por fin
abre en el espacio universitario a otro conocimiento no androcéntrico pero
tampoco ginecocéntrico”, tratamos de hacer una concepción crítica del mundo,
apoyándonos en autoras y autores que han abierto el pensamiento a una visión
innovadora del mundo contemporáneo, desde luego en nuestra elección está
conocer a autoras mujeres, pero no solo porque son mujeres sino también porque
han contribuido en su especialidad, a develar, interpretar, analizar la
problemática que vivimos en el mundo contemporáneo, y entonces tenemos una predilección
por estudiar el pensamiento crítico feminista.
Por
último, Lagarde y de los Ríos agradeció a la UABJO, representada en la
ceremonia por el Secretario Académico, César Roberto Trujillo Reyes, y el
abogado general, Francisco Ramos Reynoso, al tiempo de resaltar la labor
realizada por el grupo coordinador del Diplomado, que encabezó Érika Lili Díaz
Cruz, a quienes les indicó que “de eso se trata de atrevernos a hacer las cosas”.
El
Diplomado Internacional de Estudios de las Mujeres, Feminismos y
Descolonización le da a la UABJO “un aire de innovación, que ojalá se continúe,
que se profundice, que no encuentre obstáculos para hacer el siguiente
diplomado, la maestría, los cursos y seminarios, que todo lo que haya que hacer
y sobre todo que esta universidad incorpore el feminismo al pensum académico y
a la política universitaria”.
Antes
intervinieron la coordinadora del Diplomado, Érika Lili Díaz Cruz, quien
destacó las acciones colectivas y pactos entre mujeres para lograr la
realización del diplomado que la UABJO efectuó en coordinación del Comisión
Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI).
En
nombre de las diplomantes intervino Aurea Marcela Ceja Albanés, quien expuso
que este proceso de aprendizaje representó la posibilidad de dar nombre a las
mujeres, a lo femenino, a los constructos de género, a los procesos; de dar
nombre a todo lo que teníamos necesidad de nombrar.
Además de significar la oportunidad
de acercarnos a diferentes posturas teóricas para definir el ser mujeres, así,
en plural, sin esencialismos, desde diferentes lugares, que representan
diferentes posiciones existenciales, diferentes contextos, diferentes orígenes,
diferentes historias, desde el reconocimiento de que eso que nombramos como
“mujer” (y como hombre) es una construcción.
Luego de demandar la continuación
universitaria de estudios de las mujeres y feminismos en la máxima casa de
estudios de Oaxaca, Ceja Albanés expuso que la colonización es un proceso que
se reconstruye y se refuerza en el tiempo, que se colonizan aún los
territorios, las conciencias y los cuerpos.
“Necesitamos seguir reuniéndonos,
hablándonos, escuchándonos, para hermanarnos, ser cómplices, “comadres”, como
nos insistió la maestra Minerva Valenzuela, lo que implica mirarnos semejantes
con nuestras diferencias, reconocernos valientes, como dice otra de nuestras
profesoras Francesca Gargallo, al saber que todas hemos tomado decisiones
fundamentales en nuestras vidas, informadas, voluntarias –voluntariosas, diría
yo-, transgresoras de los mandatos que nos lastiman y que son causa de una
variedad de formas de violencia”.
También
intervino la maestra Judith Bautista Pérez, catedrática e investigadora
de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), que se refirió a racismo, la
discriminación de grupos de población con menos oportunidades de acceder a la
educación y sobre todo espacios para discutir y transformar la educación. “Se
trata de mirar de forma crítica las opresiones del sistema capitalista que
socava a las mujeres y a las personas no blancas”, puntualizó.