CARTA ABIERTA
A LA COMUNIDAD DE ECOSUR
Los medios de comunicación masiva de alcance nacional y estatal no han dado
la cobertura suficiente y necesaria para que la ciudadanía se forme una opinión
y tome posiciones preventivas sobre la ola de violencia y terror que ha
envuelto desde hace varios meses al municipio de Tacotalpa (Tabasco), y otros
aledaños del mismo estado y del vecino Chiapas. Primero, el pasado 27 de abril,
ocurrió el asesinato de cuatro niños de la comunidad de Villa Luz (Tabasco), de
edades entre los siete y diez años que obligaron al emplazamiento del ejército
en el poblado de Tapijulapa. Resurge ahora con seis personas jóvenes y
adolescentes desaparecidas en las últimas dos semanas, de las cuales tres
fueron encontradas ultrajadas y asesinadas. Entre ellas, nuestra querida
compañera, la bióloga Durvin Ramírez Díaz, encontrada sin vida el viernes 31 de
agosto, después de cuatro días de desaparecida. Ella fue secuestrada cuando se
dirigía, a pie y en transporte colectivo rural, a impartir un taller en el
ejido La Pila. Durvin se desempeñaba como técnica de campo en proyectos
relacionados con la Universidad Intercultural del Estado de Tabasco (UIET) y
ECOSUR. Era madre de dos niños de edad escolar de primaria y esposa de nuestro
querido amigo Carlos Jiménez Aranda (Charly), investigador y docente de la
UIET, a quien acompañamos en su dolor y apoyaremos en su duelo.
Nosotros, académicos de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT),
de la Universidad Intercultural de Chiapas (UNICH), de la Universidad Autónoma
Chapingo (UACH), de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH), de la UIET y de
ECOSUR, integrantes del proyecto CONACYT-FORDECYT 143303 “Gestión y estrategias
de manejo sustentable para el desarrollo regional en la cuenca hidrográfica transfronteriza
Grijalva”, expresamos nuestra profunda indignación por los hechos ocurridos,
nuestro dolor por las familias de las víctimas, y nuestra impotencia por no
poder acompañar libremente en sus esfuerzos de desarrollo a los miembros de las
comunidades con las que colaboramos desde hace dos años, dejándolas en su
marginación ancestral, en la inseguridad y el terror.
Además de echar por tierra los avances que en materia de desarrollo
regional sustentable se hayan logrado mediante el ecoturismo y otros programas
asistenciales en años recientes (Tapijulapa pertenece al programa “Pueblos
Mágicos”), los hechos ocurridos vulneran gravemente los avances obtenidos en la
capacitación local por el proyecto FORDECYT Cuenca Grijalva, con la
participación de numerosos miembros de las instituciones arriba citadas y de la
población de ocho comunidades de los municipios de Tacotalpa (Tabasco) y
Huitiupán (Chiapas). En la región alta de la cuenca Grijalva, en los municipios
chiapanecos de Motozintla de Mendoza y Mazapa de Madero, también se han
presentado recientemente incidentes graves de inestabilidad social por
inconformidades electorales que impideron el
libre acceso al área por varios días. Igualmente, los medios nacionales y
estatales omitieron informar a la ciudadanía sobre estos bloqueos.
Denunciamos ante las autoridades responsables las condiciones de
inseguridad y de desinformación que afectan a gran parte del país, pero en
particular a las regiones en las que aportamos nuestro trabajo de
investigación, docencia a jóvenes y construcción de capacidades en las
comunidades. Asimismo, solicitamos la solidaridad de las instituciones e
individuos que apoyan y realizan las actividades de investigación y desarrollo
en todo México. Las instituciones académicas públicas en la región han
orientado su vocación al entendimiento y solución de los graves problemas
sociales, económicos, de salud y ambientales que aquejan a las poblaciones más
marginadas de los estados de la frontera sur de México y, por tanto, nuestra
denuncia y petición cuentan con el respaldo moral de nuestras respectivas
comunidades académicas. Continuaremos con nuestro compromiso de aplicar los
recursos operativos limitados que se nos asignen para atender los problemas de
muchas de las poblaciones más marginadas en nuestro país, buscando a la vez la
seguridad de los integrantes de nuestros grupos y de las comunidades
participantes. Demandamos al Gobierno Federal y a los de Tabasco y Chiapas que
apliquen todo su esfuerzo y capacidades para esclarecer los lamentables hechos,
devuelvan al seno de sus familias a los jóvenes desaparecidos y garanticen el
estado de derecho y la seguridad en acuerdo con las comunidades para poder
realizar nuestras tareas en beneficio de quienes menos tienen en la región.
(Siguen hojas con firmas e instituciones de adscripción) Responsable de la
publicación: Mario González Espinosa
6 de septiembre de 2012 San Francisco de Campeche, Campeche
A LA OPINION PÚBLICA
PRONUNCIAMIENTO DE LA REGEN POR EL FEMINICIDIO DE DURVIN
RAMÍREZ EN TABASCO
Durvin Ramírez Díaz, bióloga de 34 años y madre de dos pequeños, fue
encontrada sin vida el 31 de agosto de 2012 en un camino hacia la comunidad de
La Pila, municipio de Tacotalpa, Tabasco (fronterizo con Chiapas). Durvin se
desempeñaba como técnica académica y era esposa de un profesor de la
Universidad Intercultural del Estado de Tabasco. La última vez que se le vio
con vida realizaba trabajo de campo.
Este caso, como otros acontecimientos similares reflejan el ambiente de
inseguridad que se vive en el país, haciendo que la vida cotidiana, tanto de
campesinos como académicos se vuelva más vulnerable, en especial para las
mujeres. El caso de Durvin, aumenta la cifra de feminicidios en el país.
Por lo tanto, la Red de Estudios de Género de la Región Sur-Sureste (REGEN)
de ANUIES manifiesta su preocupación ante sucesos como el acontecido a la
colega Durvin Ramírez Díaz. Las instituciones integrantes de la REGEN expresan
su consternación ante las violaciones en contra de los derechos humanos de las
mujeres y en particular contra las estudiantes, las universitarias y las académicas.
La REGEN, integrada por 17 instituciones de educación superior y centros
públicas de investigación, reafirma su compromiso con una mayor equidad de la
educación superior en el sureste de México, en la búsqueda de una vida digna,
libre de violencia y con derecho al desarrollo personal y profesional de las
mujeres de la región.
Como instituciones académicas, exigimos seguridad para realizar un trabajo
que beneficia a la sociedad y hacemos un llamado a las autoridades para detener
la ola de violencia desatada en la región.
Atentamente
Integrantes de la Red de
Estudios de Género de la Región Sur-Sureste (REGEN) de ANUIES.