jueves, 12 de abril de 2012

HOSTIGAMIENTO SEXUAL 2

CARTA DE PETICION DE APOYO
A LAS ORGANIZACIONES DE LUCHA,
A LAS COMUNICADORAS Y COMUNICADORES
A LA SOCIEDAD EN GENERAL
P r e s e n t e
Por este medio, solicitamos su apoyo para la búsqueda de justicia ante el caso de hostigamiento sexual y laboral que sufrimos dentro de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Somos dos mujeres profesionistas que tuvimos un desempeño intachable como trabajadoras del área de comunicación social del Organismo nacional.
Desde que entramos a laborar allí, una dos años y otra un año 4 meses, fuimos víctimas de las conductas reprobables del Coordinador General de Comunicación y Proyectos, el Lic. Jorge Arturo Zárate Vite.
Como ocurre frecuentemente en estos casos, al principio fue difícil enfrentar la situación y asumir nuestro papel de víctimas. Agotamos la vía del diálogo, inútilmente creímos que el Coordinador dejaría de lado esos comportamientos.
Afortunadamente, el momento de valor llegó y decidimos unirnos y denunciar.
Nos reunimos con el Primer Visitador General, el Dr. Luis García López Guerrero y tratamos de hablar con Raúl Plascencia Villanueva, presidente de la institución, pero éste último se negó a recibirnos. Fuimos revictimizadas por nuestras propias autoridades.
Fue entonces que levantamos una queja ante el Órgano Interno de Control, misma que hasta la fecha desconocemos si ha tenido algún avance.
Pedimos apoyo y previsiones para no estar más en contacto con el agresor. Estábamos dispuestas a esperar el proceso interno.
Sin embargo, Arturo Zárate, apoyado por otros miembros del equipo que conforman el área de Comunicación y Proyectos, comenzó a hostigarnos laboralmente con medidas administrativas, limitando nuestra participación o con presiones de horario.
Las secuelas en nosotras eran evidentes: depresión, enfermedades nerviosas, incluso divorcio en uno de los casos.
Apelamos a la sensibilidad de la CNDH, que es la encargada de velar por la protección y defensa de los derechos humanos en nuestro país y sólo encontramos apatía. La simulación de una institución que dice luchar por la defensa de los grupos en situación de vulnerabilidad se hizo patente.
El pasado 31 de marzo , ante la falta de apoyo, nos vimos orilladas a renunciar porque la situación fue insostenible.
Posteriormente decidimos acudir a las instancias legales a fin de llevar este proceso a sus ultimas consecuencias y buscar la justicia ante este abuso.
Sabemos que no es suficiente y que necesitamos seguir alzando la voz, todas juntas, para terminar con la impunidad en este tipo de casos.
Es indispensable exigir cuentas a las autoridades para que no que no se diluya su compromiso, para que ésta no sea una más de las investigaciones fallidas o perdidas.
Por eso nos permitimos pedir su apoyo y su solidaridad, convencidas de que estos abusos tiene que erradicarse, de que debemos seguir cuestionando el actuar de las instituciones… de que tenemos un compromiso con aquellas que guardan silencio, con las que son niñas o con aquellas que están por nacer.
Queremos un México sin violencia para las mujeres, un país sin simulación.
Atentamente
Las afectadas

Acudir a nuestra vocera: periodista Sara Lovera